Fabricación.
La principal característica de nuestro taller es la elaboración completa del abanico. De principio a fin.
Esto es algo que se perdió hace muchos años, cuando la manufacturación se extendió entre los artesanos y los talleres familiares, que realizaban la elaboración completa, dieron paso a maestros artesanos y talleres especializados en trabajos concretos: Grabadores, caladores, pintores, montadores… de esta manera, un abanico era realizado por diversos artesanos en diversos talleres.
Pero con la llegada de las competencias de otros países, esto se pierde y muchos puestos de trabajo desaparecen, hasta llegar a nuestros días, donde podemos encontrar el último resquicio de la artesanía en nuestro país España, en Valencia, y más concretamente en Aldaia, el único taller donde se realiza un abanico de principio a fin igual que los antiguos maestros artesanos.
La restauración de abanicos antiguos, conlleva el estudio y análisis de cada pieza. Es así como hemos aprendido a trabajar como lo hacían antiguamente y así inspirarnos para la creación de nuevas piezas, plasmando en ellas lo clásico y hermoso de otras épocas.
El único secreto que esconde esta profesión, es la pasión. Apasionándote con estos bellos objetos, con las historias que transmiten, con el buen hacer que tantos artesanos anónimos han dejado en ellos, llegas a amarlos, a lo que le invitamos, descubriendo un maravilloso mundo que abre sus puertas ante usted, para para poder descubrir infinidad de historias y anécdotas en torno a los abanicos.
Nuestro oficio… Nuestra pasión… Nuestra vida...
Seguramente, la única manera de mantener vivo este oficio, es vivirlo con pasión.
Cada pincelada, cada surco de buril, cada hueco de luz, debe llevar impregnada la pasión y el amor a este oficio. Nuestro deseo es poder transmitir en nuestras obras todo el cariño con el que son realizadas. Es algo necesario para que brille su belleza y que nos han enseñado nuestros ancestros.
Nos sentimos privilegiados de poder dedicarnos a lo que más nos gusta y apasiona…y más aún, trabajar como lo hacían nuestros antepasados artesanos, utilizando las mismas técnicas y herramientas, adaptadas a nuestros días, para poder así reflejar en nuestros trabajos el amor y la pasión por este bello arte.